miércoles, 25 de julio de 2012

Fiestas para Gente con Muuuucha Experiencia/ Fiestas para Adultos Mayores


 Los cumpleaños o bodas o aniversarios de personas con más 7 décadas de experiencia vital son mis fiestas favoritas. Los que celebran más de ochenta son las mejores. Hay gente de todas las edades, hay nietos y biznietos corriendo y saltando, hay primos rencontrándose y sobre todo, en mi caso, puedo tocar mi música favorita, la música del ayer.
Para hacer una buena fiesta a abuela hay que tomar varios factores en consideración. Entre las cosas que he visto a través de los años, las buenas fiestas a personas mayorcitas han tomado en cuenta lo siguiente:
1-     El homenajeado no cocinó el arroz con gandules, ni preparó el budín ni tuvo que encargarse de nada.
2-     Los invitados principales fueron los amigos más cercanos del homenajeado, no los panas de sus hijos, ni de sus nietos.
3-     Se encargó comida fácil de servir, masticar y digerir. La comida se sirvió tan pronto llegaron los invitados.
4-     Se hizo la fiesta en un lugar con fácil acceso, sin escaleras que subir, baños cómodos y accesibles, y con buena acústica (techos acústicos y alfombra) para que los viejitos pudieran hablar sin tener que competir con el gallinero que suele formarse en lugares de mala acústica (locales con paredes de cristal o cemento, pisos de terrazo o mármol y poco cortinaje o mantelería). El local debe ser fresco o tener un aire acondicionado bien controlado.
5-     Se contrató un grupo musical que tocara la música de la época a un volumen que no afectara los “hearing aids” ni las conversaciones de los asistentes.
6-     Todo estaba preparado; salón, comida, música, a la hora que se citó a los invitados. Los mayorcitos llegan a la hora que se les dice o media hora antes.
7-     La fiesta no debe pasar, por ninguna razón, de cuatros horas. Tres horas es aún mejor.
8-     Si el grupo musical toca música bailable hay que hacer los números de menos de tres minutos, y hay que tocar pasodobles, danzas, merengues clásicos, guarachas, boleros clásicos y, dependiendo las personas, tangos y oldies en inglés.
De los locales de fiesta en los que he tocado, y he tocado en muchos, suelo recomendar a Casa Antonio en el Condado (el salón del segundo piso que da a la carretera tiene buena acústica, ascensor y barra independiente del salón), Los Chavales y  El Zipperle. Casi todos los hoteles tienen salones con buena acústica. Hay que tomar en cuenta que si hay vista hay cristales y si hay cristales suele haber problemas de acústica (por ej. Casa España, Casa Cuba y el penthouse lounge de la Concha). Cuando las fiestas se hacen en terrazas abiertas (Siesta Alegre) la acústica siempre es buena y el sonido se dispersa  mejor.
Lo que más importa a la hora de celebrar la vida de las personas mayores es que sean ellos los que gocen más; que las decisiones se tomen pensando en lo que sabemos que a ellos les gusta. En resumidas cuentas “el party es de ellos”.